En interiorismo la iluminación es tan importante que es posible decorar con luz y no utilizar nada más.
Iluminación: la luz como elemento decorativo
Algunas ideas y consejos para trabajar decorar espacios jugando con la infinita gama de posibilidades que da la iluminación.
Y es que bien cuidada, diseñada y planificada genera efectos espectaculares de gran impacto.
Al contrario, si no se elige y calcula bien, puede arruinarte cualquier decoración por maravillosa que sea, así que hay que tener mucho cuidado con ella.
La luz es uno de los aspectos que más juego creativo dan en la decoración de casas, oficinas, hoteles o locales.
Es tan versátil, hay tantos tipos, intensidades, tonalidades y luminarias que se necesita casi un máster para ser experto.
De hecho cualquier proyecto de interiorismo que no te entregue un plano o estudio de iluminación no será realmente un verdadero proyecto.
El inconveniente es que a diferencia de otras opciones de impacto (como los papeles pintados, por ejemplo) la iluminación buena es cara.
Sí, podemos encontrar leds en los chinos y halógenos a 10 euros, pero en este caso la calidad sí se nota y cualquier otra opción no es recomendable.
En cualquier caso, dada la complejidad de esta temática, en esta sección iremos desgranando todo tipo de trucos, términos, ideas para decorar con luz y formas de jugar con ella para que vayas aprendiendo a iluminar tus espacios.
Para que te hagas una idea, la forma más fácil de iluminar nuestra vivienda es con lámparas de techo. Esta sería la manera más clásica.
No obstante, eligiendo determinados modelos, este tipo de lámparas pueden generar un gran impacto, ya que dependiendo de un tipo u otro pueden resultar muy llamativas.
Eso sí, hay que elegir bien el estilo y la tipología, ya que la luz viene de manera diferente si procede de una lámpara de pie, de un aplique o de una colgada del techo.
Las lámparas de sobremesa nos suelen dar una luz de apoyo muy interesante para ciertos momentos, y también pueden ser muy decorativas.
Por su parte, los leds permietrales por su parte dan muy buena luz a toda la estancia sin necesidad de que se vea la fuente, lo cual los hace también muy agradables a la vista.
Por otro lado, también podemos iluminar con velas, una luz natural-artificial que supone un gran recurso decorativo, ya que aporta una temperatura muy cálida y un ambiente muy acogedor.
Existen mil maneras de decorar con velas, desde reutilizar tarros de cristal hasta agrupar velas independientes en una zona concreta de la casa.
Y por último las guirnaldas. Aunque habitualmente se utilizan de noche son muy interesantes usarlas también para decorar una escalera o una habitación a plena luz del día.
Lo que sí es seguro es que le dan un aspecto y un toque muy personal, informal, joven y bohemio a cualquier estancia.
Fuente: Decofilia