En un mercado plagado de nuevos diseños para los artículos de iluminación resulta complicado que un nuevo producto destaque. Y más si se trata de un artículo tan cotidiano como una lámpara de mesa. Sin embargo, siempre surgen audacias creativas que encuentran ese punto inexplorado y chocante que nos descoloca.
Iluminación: el interruptor flotante de Li Zanwen
Hoy día, resulta complicado que un nuevo producto destaque. Sin embargo, en el campo de la iluminación siempre surgen audacias creativas
Una de ellas llega desde Guangdong de la mano del joven creador chino Li Zanwen. Su serie «Heng Balance Lamp» incorpora un sistema de encendido sumamente original. En lugar de un interruptor al uso, la luz aparece al interactuar en el aire dos bolas de madera. Una está suspendida permanentemente, mientras que la otra descansa sobre la base. Al acercar esta a su gemela se produce la magia: ambas quedan levitando gracias a unos imanes internos que accionan el interruptor oculto, el circuito eléctrico se cierra y ¡sorpresa!, se enciende la lámpara. Tras unos segundos de oscilación, el balanceo cesa y el producto se transforma en una escultura brillante.
Su diseño minimalista incluye el elemento de iluminación dentro del marco, que adopta formas redondeadas muy atractivas. Sus tres versiones (elipse, círculo y cuadrado) pueden utilizarse como lámparas de estudio, en el dormitorio, sobre una mesa auxiliar y en muchos otros lugares donde se necesite un foco no muy potente. Además, cuando está apagada también luce como una obra de arte.
El marco, muy agradable al tacto, está realizado en madera de haya, lo que potencia la calidez del conjunto. La sencillez de la estructura facilita su producción industrial, un paso que se ha hecho realidad gracias a las campañas de micromecenazgo promovidas en las plataformas Allocacoc DesignNest y Kickstarter. El éxito ha sido tan grande que Zanwen ha añadido al proyecto nuevas versiones con acabados en rojo, negro, blanco y en un tono de madera más oscuro para que pueda combinar en cualquier ambiente.
Ese equilibrio zen de las dos esferas levitando en el vacío llama mucho la atención y resulta una alternativa bastante divertida a los interruptores tradicionales. Así pues, no es de extrañar que la lámpara Heng fuese premiada con un Red Dot Award en 2016: un enfoque innovador que pone algo de magia en nuestras vidas.
Fotografías: Kickstarter
Fuente: Despierta y mira