La Bauhaus nació como una semilla de creatividad que floreció en la mente de un grupo de visionarios que buscaban un cambio radical en la arquitectura y el diseño. La escuela fue fundada por Walter Gropius y formaron parte de ella, entre muchos otros, Paul Klee y Vasili Kandinski.
La arquitectura de la Bauhaus: creatividad e innovación
Esa belleza que reconocemos en la arquitectura moderna de muchas ciudades tiene su origen en una escuela de artes y diseño de La Bauhaus, fundada en 1919.
La Bauhaus se centraba en la creación de objetos funcionales y estéticamente atractivos. La escuela abogaba por una unión entre el arte y la producción industrial, y esto se refleja en la arquitectura que produjeron. Los edificios de la Bauhaus se caracterizan por su simplicidad, funcionalidad y elegancia, y son un ejemplo de cómo el diseño puede mejorar la vida cotidiana.
La arquitectura Bauhaus utiliza materiales como el acero y el vidrio. Si bien esta corriente arquitectónica tuvo su mayor auge en Europa, también tuvo influencia en otras partes del mundo, incluyendo algunas ciudades de América Latina y Asia. En la actualidad, algunas ciudades como Tel Aviv, en Israel, y Chicago, en Estados Unidos, cuentan con rascacielos de este estilo.Walter Gropius fue uno de los arquitectos más importantes de la Bauhaus. La obra más destacada de Gropius es la sede de la escuela Bauhaus en Dessau, Alemania, construida entre 1925 y 1926. El edificio es un ejemplo de arquitectura funcionalista con un estilo limpio. Además de su trabajo en la Bauhaus, Gropius también diseñó varios edificios residenciales y comerciales en Europa y Estados Unidos, incluyendo el edificio de apartamentos conocido como el Pan Am Building en Nueva York.
La Bauhaus da cuenta de cómo la creatividad humana ha permitido a los artistas, arquitectos y diseñadores imaginar y construir espacios estimulantes y funcionales; fue una escuela que buscó revolucionar la forma de pensar sobre el arte, el diseño y la arquitectura. Su visión de la creatividad y el arte como elementos esenciales para la mejora de la calidad de vida de las personas sigue siendo relevante en la actualidad, y su legado continúa inspirando a personas de todo el mundo.
A veces olvidamos mirar lo que nos rodea, por eso les invito a asomarse, cada vez que tengan la oportunidad, por una ventana para observar aquellos paisajes urbanos que provocan en nosotros asombro y sorpresa, que nos conducen a imaginar nuevas posibilidades y nos recuerdan que la creatividad humana sigue siendo el motor de la innovación, esa chispa que enciende una llama, una llama que arde y nos invita a seguir explorando, a seguir creando, a seguir soñando.
Fuente: Zaira Espíritu