Hiroshi Nakamura, arquitecto japonés reconocido por su enfoque innovador y sensible hacia la arquitectura, diseñó la House SH en Tokio poco después de establecer su propia firma, Hiroshi Nakamura & NAP, en 2002. Este proyecto ejemplifica la capacidad de la arquitectura japonesa para adaptarse a contextos urbanos densos sin sacrificar la calidad de vida de sus habitantes.
SH House: La arquitectura japonesa que domestica la luz
Esta casa ofrece un entorno que evoluciona con sus habitantes, fomentando una relación íntima y dinámica entre la arquitectura y quienes la habitan.
Desafíos del entorno urbano
La House SH se encuentra en un pequeño terreno de 41 metros cuadrados en Tokio, una ciudad donde el espacio es un recurso limitado. El sitio está rodeado por tres lados, con la única apertura hacia el norte, donde una calle separa la casa de un edificio de apartamentos cuyas balcones miran hacia el sur, directamente hacia la propiedad. Esta configuración presentaba dos desafíos principales: la dificultad de permitir la entrada de luz solar directa y la necesidad de mantener la privacidad en un entorno tan expuesto.
Soluciones arquitectónicas innovadoras
Para abordar estos desafíos, Nakamura optó por una fachada sin ventanas en el lado de la calle, eliminando así cualquier posibilidad de comprometer la privacidad de los residentes. En lugar de las ventanas tradicionales, diseñó un pozo de luz central coronado por una claraboya que permite que la luz natural se filtre hasta el nivel del sótano. Esta estrategia no solo ilumina el interior de la casa, sino que también crea una conexión vertical entre los diferentes niveles del hogar.
El salón, con menos de 30 metros cuadrados, se beneficia especialmente de esta disposición. Para maximizar la sensación de amplitud, se diseñó una pared curva que, al ser bañada por la luz suave de la claraboya, ofrece una sensación de profundidad infinita. La curvatura de la pared varía en profundidad y altura, creando nichos que se adaptan a diferentes actividades y tamaños corporales. Por ejemplo, los adultos pueden acomodarse en las partes más profundas, mientras que los niños encuentran espacios a su medida en las áreas más superficiales. Esta característica ha llevado a que la hija de los propietarios utilice la pared como un tobogán improvisado, demostrando cómo el diseño fomenta interacciones lúdicas y espontáneas.
La arquitectura y la relación entre el usuario y el espacio
La House SH está impregnada de elementos que invitan a los residentes a descubrir y adaptar el espacio según sus necesidades y comportamientos. A diferencia de las habitaciones convencionales con muebles estáticos, esta casa ofrece un entorno que evoluciona con sus habitantes, fomentando una relación íntima y dinámica entre la arquitectura y quienes la habitan.
La House SH de Hiroshi Nakamura es un testimonio de cómo la arquitectura japonesa puede innovar dentro de las limitaciones urbanas, creando espacios que no solo responden a desafíos funcionales, sino que también enriquecen la experiencia de vida de sus habitantes. A través de soluciones de diseño ingeniosas y una comprensión profunda de la interacción humana con el espacio, Nakamura ha logrado transformar un sitio complicado en un hogar que celebra la luz, la privacidad y la adaptabilidad.
Fuente: Despierta y Mira